Sueña con tener su propia casa? Jehová les prometió a los exiliados que cuando volvieran, iban a construir sus propias casas y a vivir en ellas.
Jehová también se preocupa por nosotros, tanto si perdemos nuestra casa como si nos obligan a abandonarla. Cuando servimos a Jehová disfrutamos de una seguridad espiritual que solo él nos puede dar. El hogar espiritual que tenemos ahora nos recuerda que en el nuevo mundo Jehová nos dará un lugar al que llamar nuestro hogar.
Construirán casas y vivirán en ellas. ¿Cómo se sentiría si tuviera que viajar por un camino en el que pudiera encontrarse con animales salvajes y delincuentes. Jehová les prometió a los exiliados que regresarían de Babilonia sanos y salvos y que vivirían en paz.
En el paraíso espiritual en el que vivimos. Personas que fueron violentas. Ahora son humildes, amorosas y pacificas. Imagine la paz que reinará en el nuevo mundo. Podremos viajar libremente por este hermoso planeta. Recorrer cada rincón Y admirar la creación del Dios verdadero.
Sin ningún temor. No harán ningún daño ni destruirá nada en toda mi santa montaña, dice Jehová. La guía tan clara que nos da Jehová. Nos acerca a él. Y nos ayuda a estar sanos en sentido espiritual. Muchas personas son prisioneras de las enseñanzas falsas, pero Jehová ofrece verdadera libertad. La salud espiritual que tenemos ahora nos recuerda que también tendremos salud perfecta en sentido físico y mental, en el paraíso.
Imagínese lo que será despertar cada día sintiéndose limpio, sano, feliz, y con ganas de vivir. Jehová promete, ningún habitante dirá, estoy enfermo. Jehová cumplió lo que les prometió a los exiliados. Restauró aquella en ruinas. Fue como si le devolviera la vida. En 1919 Jehová hizo algo parecido. Liberó a su pueblo de la religión falsa y le dio fuerzas para predicar, tal como Jehová resucitó a su pueblo de una muerte simbólica en el futuro eliminará los efectos de la muerte física. Dios eliminará la muerte para siempre, imagínese podrá vivir más que cualquier árbol. Porque la muerte ya no existirá.