Ey, ¿Así que ya tienen trabajo eh? Sus papás deben estar muy orgullosos. Tu primer sueldo. ¿Y qué vas a hacer con todo ese dinero? Mmm. Todos lo necesitamos. Claro, ningún trabajo es perfecto. Todos tienen sus retos. Pero el dinero que tanto nos cuesta ganar nos sirve para hacer y comprar un montón de cosas.
Por ejemplo, lo que necesitamos para vivir. También podemos comprar cosas que nos gusten. Pero hay un par de cosas que deberías recordar sobre el dinero. Pon el dinero en su lugar. No, no, no estamos hablando de un lugar en particular, como un banco. Recuerda cuáles son las cosas más importantes.
La biblia dice que te hagas rico a los ojos de Dios. Dedica tiempo a conocerlo. Hazte su amigo, él te ayudará a estar contento con lo que tienes, sea mucho o muy poquito, tú serás más feliz y lo harás feliz a él.
En Proverbios 23:5, la biblia dice que al dinero le pueden salir alas e irse volando. Por eso es tan importante que aprendas a cuidar bien tu dinero para que cuando lo necesites tu dinero te cuide a ti. Primero piensa en qué vas a gastar tu dinero o lo que es lo mismo haz un presupuesto. Anota las cosas que necesitas y cuánto cuestan. Muy bien. Ahora agrega algún caprichito. Algo que se te antoje.
Ahora súmalo todo ¿Ya lo tienes? Compara el total con lo que ganas cada semana. Mmm. ¿De verdad son tan importantes esas cosas como para gastarte tanto dinero en ellas? Quizás tengas que esperar un poco y guardar parte de ese dinero. Ya sabes, ahorrar para cuando lo necesites. Uno nunca sabe en Eclesiastés 9:11, la biblia dice que cualquiera puede pasar por un mal momento o tener un imprevisto. Por eso, ¿Por qué no ahorras algo de dinero? Así podrás usarlo cuando tú lo necesites o cuando quieras ayudar a alguien. Quizás quieras comprarte algo que cuesta más dinero del que ganas en una semana en un mes o en un año.
Así que cada semana ahorra algo de dinero para que, a ver, espera ¿Qué? Ah, no quieres esperar. Uh, crédito. Bueno, eso es una opción. Pero las tarjetas no son gratis. Te cobran intereses y eso puede llegar a ser mucho dinero. Cuando compras a crédito es fácil perder la cuenta de lo que has gastado y puedes acabar pagando mucho más.
A veces puedes pasarte años y años y años pagando tus tarjetas de crédito. Entonces piensa en qué vas a gastar tu dinero. Ajústate a tu presupuesto. Ahorra para cualquier imprevisto y diles no a las deudas innecesarias. Haciendo eso tendrás más tiempo para conocer a Dios. Eso es. Ahora ya sabes cómo usar bien tu dinero.